Esto de ser humanos es como una casa de huéspedes
Cada mañana un nuevo arribo.
Una alegría, una tristeza, una maldad,
alguna momentánea conciencia llega
como un visitante inesperado.
Dales la bienvenida y entretén a todos!
Incluso si son un manojo de penas,
que violentamente vacían tu casa de su amoblamiento,
aun así, trata a cada invitado con honor.
Puede estar creandote el espacio
para un nuevo deleite.

Rumi